El Informe Arc Flash de Evaluación de Riesgos que ofrece TÜV Rheinland permite medir los riesgos, evitando o reduciendo los efectos del arco eléctrico debido a accidentes por choque y/o arco eléctrico que se deriva de la liberación de energía térmica elevada.

Según recoge el R.D. 614/2001 de 8 de junio, sobre disposiciones mínimas para la protección de la salud y seguridad de los trabajadores frente al riesgo eléctrico, se entenderá como riesgo eléctrico, entre otros, el riesgo de quemaduras por choque eléctrico o por arco eléctrico.

Al analizar los riesgos asociados a la utilización de la energía eléctrica se piensa de forma inmediata en el riesgo de contacto eléctrico, ya sea de forma directa o indirecta. Sin embargo, en baja tensión, es relativamente frecuente infravalorar otro riesgo importante asociado a esta forma de energía, el arco eléctrico. El análisis adecuado de este riesgo y la definición de medidas preventivas eficaces para controlarlo son aspectos fundamentales para reducir las graves consecuencias de este tipo de accidente eléctrico.

¿Qué es un arco eléctrico?

El aire tiene propiedades aislantes respecto a la conducción de la corriente eléctrica. Sin embargo, si se reduce la distancia entre dos elementos conductores con una diferencia de potencial eléctrico suficientemente importante, o las propiedades del aire se ven alteradas, puede superarse la rigidez dieléctrica del mismo permitiendo pasar la corriente a través de él. En ese momento se produce el denominado arco eléctrico, una descarga continuada entre los conductores afectados. En un arco eléctrico pueden producirse temperaturas de miles de grados centígrados, capaces de fundir los elementos metálicos, normalmente de cobre o aluminio, existentes en sus proximidades. Tras generarse el arco se producen diversos efectos muy perjudiciales como la proyección de metales fundidos (a modo de metralla) a distancias que pueden alcanzar varios metros, ondas de presión elevada, luz intensa, etc

Existen requisitos esenciales para la seguridad eléctrica

Ambas las normas nacionales e internacionales se refieren a los pasos y procedimientos a tomar para la protección contra los peligros de trabajar cerca o en los equipos eléctricos. En particular, las altas temperaturas provocadas por el arco eléctrico pueden causar daños catastróficos.
El enfoque adoptado en la Estados Unidos para protegerse contra los peligros derivados de Arcos eléctricos y sus efectos en los seres humanos con la norma NFPA-70E – Norma para la seguridad eléctrica en los lugares de trabajo (National Fire Protection Association)– define un proceso claro para determinar el nivel de riesgo de arco eléctrico en las tareas realizadas, proponiendo en función de éste los equipos de protección más adecuados.

Por ello es tan importante la evaluación del riesgo del Arco Eléctrico de acuerdo a los objetivos de la norma americana OSHA CRF29 realizando, o en su caso manteniendo actualizada, la evaluación de la norma NFPA 70E que da cumplimiento a los mismos. Son precisamente las compañías estadounidenses con filiales en España y aquellas empresas con actividad en Estados Unidos las más interesadas en cumplir este requisito que es ya de obligatorio cumplimiento en el país anglosajón.

Dadas las graves consecuencias que un arco eléctrico puede producir en las personas afectadas, parece necesaria una mejora de las medidas preventivas para evitar o al menos minimizar, las consecuencias de la exposición a este tipo de riesgos.