Los contactores AF de ABB evitan fallos en sistemas HVAC

Los contactores AF de ABB resuelven los problemas inherentes a las bobinas de doble frecuencia, y ofrecen una operación estable en sistemas de 60 Hz, incluso bajo condiciones extremas.

Los datos se han convertido en un recurso estratégico. Cada interacción digital, desde una videollamada hasta una transacción financiera, depende de infraestructuras capaces de procesar, almacenar y distribuir información de forma inmediata y segura. Y este es precisamente el papel que desempeñan los centros de datos, instalaciones que hoy constituyen el núcleo invisible de la economía digital.

Este crecimiento del cloud computing, del comercio electrónico, de las plataformas de streaming y, más recientemente, de la adopción masiva de IA y analítica avanzada, ha multiplicado la demanda de capacidad de cómputo. Con ello, la exigencia sobre los sistemas que mantienen en condiciones óptimas las salas de servidores. Entre todos ellos, los sistemas de climatización, particularmente los chillers de HVAC, ocupan un lugar central, pues de su fiabilidad depende que la temperatura de operación no supere límites críticos.

Cualquier fallo en la cadena de refrigeración puede derivar en interrupciones de servicio con impacto económico y reputacional. Dentro de esa cadena, un elemento aparentemente simple como el contactor adquiere un protagonismo que a menudo se pasa por alto. Comprender por qué los contactores convencionales fallan en aplicaciones de 60 Hz y cómo la tecnología AF de ABB aporta una solución robusta es clave para quienes diseñan, mantienen o gestionan infraestructuras críticas.

El reto es evitar los fallos en contactores de HVAC en 60 Hz

En un chiller, los contactores son responsables de conectar y desconectar los compresores, ventiladores y bombas. En apariencia, su función es directa, pero el entorno operativo de un data center convierte a estos dispositivos en puntos de vulnerabilidad. La mayoría de chillers se instalan en exteriores, expuestos a temperaturas extremas, fluctuaciones de tensión y perturbaciones electromagnéticas. Bajo estas condiciones, los contactores tradicionales de doble frecuencia (50/60 Hz) muestran limitaciones significativas:

  • Mayor tensión de atracción requerida a 60 Hz.
  • Inestabilidad bajo variaciones de tensión.
  • Riesgo de chattering (vibración de contactos) y arcos eléctricos.
  • Mayor sensibilidad al calor acumulado en montajes contiguos.
  • Interferencias provocadas por variadores de velocidad.

El resultado es un modo de fallo característico donde el contactor no logra cerrar de forma estable, provocando sobrecorrientes, desgaste prematuro de los compresores y, en última instancia, pérdida de servicio. Un único evento de este tipo en un data center puede traducirse en pérdidas de miles de euros por minuto de inactividad.

Limitaciones de los contactores electromagnéticos tradicionales

Para entender como funciona, hay que recordar cómo funciona un contactor: la bobina genera un campo magnético que cierra los contactos. Aunque este diseño ha sido eficaz, su adaptación a ambas frecuencias (50 y 60 Hz) complica su rendimiento. A 60 Hz, el voltaje requerido es mayor, lo que reduce el margen operativo. Si se suman condiciones extremas de temperatura y variaciones de tensión, puede producirse un funcionamiento inestable.

En aplicaciones HVAC, donde el arranque de un compresor exige fiabilidad absoluta, este compromiso tecnológico se convierte en un riesgo inaceptable. Conscientes de esta limitación, ABB ha desarrollado una solución radicalmente distinta: los contactores AF, equipados con una bobina de control electrónico. Este diseño elimina los compromisos del electromagnetismo convencional, ya que la bobina AF adapta automáticamente su comportamiento a las condiciones de la red eléctrica. De esta manera, garantiza un cierre estable incluso con fluctuaciones de tensión y bajo condiciones adversas.

Características clave de la tecnología AF

  • Control electrónico de bobina: estabilidad frente a variaciones de tensión y frecuencia.
  • Amplio rango de control (100–250 V AC/DC, 50/60 Hz): flexibilidad en diseño e instalación.
  • Consumo de energía hasta un 80% inferior: menor disipación térmica y mayor eficiencia global.
  • Supresión de transitorios integrada: protección adicional contra picos de tensión y descargas.
  • Diseño magnético 3D: precisión en la atracción de la armadura y reducción de pérdidas.

Gracias a estas innovaciones, los contactores AF son capaces tanto de aumentar la fiabilidad, como de también reducen la complejidad en la fase de ingeniería, al cubrir un rango amplio de tensiones con una sola referencia.

Impacto en sistemas HVAC de Data Centers

Los beneficios de la tecnología AF se traducen directamente en el rendimiento de un centro de datos. Al evitar el chattering y los arcos eléctricos, se incrementa la vida útil de los compresores y se reduce la frecuencia de intervenciones de mantenimiento. Esto se traduce en menos interrupciones y mayor continuidad del servicio.

En la práctica, muchos operadores han validado este impacto. Tras migrar a contactores AF, se reportan reducciones drásticas de fallos prematuros tanto en contactores como en compresores. El resultado es una mayor previsibilidad en los costes operativos y un incremento en la disponibilidad de la infraestructura crítica.