El estudio del Arco Eléctrico potencial es imprescindible para mitigar los efectos del mismo en la instalación o en sus usuarios, promoviendo así la seguridad.

Este estudio se basa en cálculos y obtención de puntos críticos, así como en la elaboración de Etiquetas de Seguridad e Higiene según criterios NFPA 70E o IEEE1584 (dependiendo de la tensión nominal del nivel en estudio), las cuales se disponen directamente sobre los cuadros eléctricos con el fin de advertir al operador qué EPI’s debe usar y la distancia de seguridad que debe mantener, entre otras informaciones.

Fundamentado en gran parte en la revisión de los procedimientos requeridos para implantar y después mantener las medidas necesarias en la disminución del riesgo, éstos se basan en las normas de Prevención de Riesgo Eléctrico en lugares de trabajo.

Cada vez son más las empresas que apuestan por una evaluación de los riesgos derivados del uso y operación de su instalación eléctrica

El estudio del Arco Eléctrico potencial es la fase final de nuestro trabajo ante el cliente. A su vez, dicho estudio se descompone en partes básicas, tanto o más útiles, que el cliente debe aprovechar para conocer las características de su instalación y cómo se comporta a nivel eléctrico mediante los siguientes estudios:

  • Flujos de Carga.
  • Corrientes de Cortocircuito, Coordinación y Selectividad de las Protecciones implicadas.
  • Estabilidad Transitoria provocada por los Armónicos de Tensión o Corriente producidos en la planta o proceso.

Cada vez más empresas apuestan por una evaluación de los riesgos derivados del uso y operación de su instalación eléctrica, sobre todo cuando conviven varios niveles de tensión e incluso de distintos tipos (CC o CA).