El Camino Lebaniego es ya la primera ruta de peregrinaje wifi del mundo, después de que Viesgo y el Gobierno de Cantabria hayan puesto en marcha el proyecto Peregrino Lebaniego Digital, una idea desarrollada por las empresas cántabras Zwit Project y Creaciones Semarac.

Quince balizas alimentadas por energía solar y distribuidas a lo largo de la ruta entre San Vicente de la Barquera y Santo Toribio de Liébana proporcionarán conexión a internet a los caminantes. Para ello, los peregrinos necesitarán descargarse una aplicación gratuita disponible para todo tipo de dispositivos móviles y que ofrecerá información sobre el camino y otras funcionalidades útiles para el visitante.

Así lo han anunciado esta mañana en Santander el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, y el presidente de Viesgo, Miguel Antoñanzas, en compañía del consejero de Industria, Innovación, Turismo y Comercio, Francisco Martín, en un acto al que han acudido numerosos representantes de los medios de comunicación y de los municipios por donde discurre la ruta.

Peregrino Lebaniego Digital es una red de contenidos e información sobre el territorio que se conecta con las personas que recorren el camino, las cuales a su vez interactúan con sus propios contactos en cualquier parte del planeta y en tiempo real. Tal y como ha destacado Miguel Antoñanzas, se trata de “la primera ruta de peregrinación conectada del mundo”, “una idea inteligente y sostenible”, según ha matizado.

Gracias a la geolocalización y a la agenda incluida en la aplicación, los peregrinos podrán ir descubriendo a lo largo del camino todos los hitos interesantes que ofrece el territorio, datos de interés, sitios que visitar, rutas alternativas, cosas que hacer, lugares donde descansar o comer… De igual modo los peregrinos pueden programar su ruta antes de partir en función de la oferta que ofrece el territorio y de sus propios gustos personales.

La aplicación se desarrolla en dos fases. La primera comienza hoy mismo, y la segunda incorporará ya en verano mejoras como realidad aumentada y la credencial lebaniega digital, la posibilidad de sellar cada etapa realizada hasta Santo Toribio y ganar el jubileo simplemente completando el paso por las 15 balizas de la red.

Por otro lado, los caminantes podrán realizar su peregrinaje de una manera más segura, ya que cada paso por una baliza quedará registrado con la información de la identidad de la persona y la hora a la que lo ha realizado.

El proyecto servirá de este modo para mejorar la experiencia del visitante y poder hacerla más intensa, sean cuales sean sus motivaciones para comenzar a andar. Además los peregrinos también tendrán la opción de aprovechar la conectividad wifi para interactuar a través de la propia aplicación o de las redes sociales, y convertirse de este modo en testigos y prescriptores de los valores culturales, naturales y religiosos del camino.

De esta manera mejorará la promoción turística de Cantabria y del propio Camino Lebaniego, declarado por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad. Por eso el proyecto también se entiende como una fórmula innovadora e inteligente de dinamizar el territorio. Cantabria tiene la oportunidad de convertirse mediante una aplicación sencilla, cercana y atractiva en un Destino Turístico Inteligente.

La apuesta de Viesgo por Cantabria

Antoñanzas ha destacado el hecho de que el proyecto sea una idea original de empresas cántabras lideradas por Zwit Project y Creaciones Semarac; para Viesgo ha sido “muy motivador poder apadrinar el talento y la energía de estas iniciativas que sin duda trascienden nuestra región y demuestran la alta cualificación de los nuestros”.

Viesgo mantiene su compromiso con Cantabria, donde se encuentra su sede principal y donde invertirá un total de 146 millones de euros en los próximos cuatro años. En Cantabria proporciona trabajo de forma directa o indirecta a más de 1.000 personas. Uno de sus proyectos más inmediatos es, con un presupuesto de 4,4 millones de euros, el nuevo edificio que albergará el centro de control y operación de la red eléctrica de la compañía. El edificio se levantará en el PCTCAN de Santander y estará operativo en 2019 con las tecnologías más innovadoras.